Kingdoms of Amalur: Reckoning fue lanzado originalmente para Xbox 360, PS3 y PC en 2012 y la versión con actualizaciones gráficas salió al mercado el 8 de septiembre de 2020 y será en marzo de este 2021 cuando podremos disfrutar del enorme universo de Amalur en la híbrida de Nintendo.
Desde su lanzamiento hace dos generaciones de consolas, el título cautivó a los amantes de los juegos de rol y de mundo abierto por la cantidad de lore y de posibilidades que presentaba el universo ideado por 38 Studios aunque se encontró con la difícil tarea de competir con Skyrim, que aunque ya tenía varios meses en el mercado eclipsó a este y otros títulos con similitudes. Para los que si lo disfrutaron resultó ser un título memorable.
¿Cómo es Kingdoms of Amalur?
Las posibilidades RPG son enormes, de inicio el jugador puede elegir entre 4 razas para el protagonista que a su vez moverá su desarrollo por tres clases diferentes con más de una veintena de habilidades cada uno.
La historia se desarrolla en 5 regiones con diferentes ambientaciones y características propias.
De la misma manera que otros títulos RPG, la mejora del personaje se logra mediante la subida de niveles que también sirve para refinar las habilidades de cada clase y que otorgarán características únicas adecuadas a nuestra clase de juego y que igual que muchos títulos similares son 3: Mago, luchador y renegado. Un buen twist a esta forma de desarrollo es que dependiendo de nuestra clase y las habilidades desbloqueadas en cada uno de los árboles liberarán «destinos» que serán de suma importancia en la partida a nivel jugable.
El combate es dinámico con fuertes cimientos de RPG clásico y cuenta con distintas florituras accesibles vía click time events. El destino del jugador (del que hablamos antes) permitirá acumular puntos para invocar una especie de bullet time que permite acabar con nuestros enemigos, aumentar nuestras estadísticas y además ganar más experiencia.
¿Un juego de 2012 en 2021?
Como ya explicamos, Kingdoms of Amalur: Re-Reckoning es una versión con mejoras de la que fue lanzada hace 9 años en 2012. Y si bien el balanceo de combate, elementos visuales y jugabilidad han sido mejoradas (no se trata de un remake, sino algo más parecido a un remaster), el juego sigue siendo muy similar al que fue lanzado en la generación de Xbox 360 y PS3. Sin embargo se trata de un título sólido que si no pudiste jugar en su momento vale mucho la pena.
Si disfrutaste con The Elder Scrolls Oblivion o Skyrim, este título no te va decepcionar.
